Hoy en día el concepto del trabajo está muy relacionado, si no totalmente, con el trabajo remunerado. Establecemos una línea muy nítida entre lo que es trabajo y el resto de la vida. El trabajo es algo inevitable (e indeseado) cuya función es proveernos de lo necesario para poder vivir. Eso sí, vivir propiamente vivir, lo hacemos en el resto de las horas. Si hacemos algún tipo de actividad no remunerada, no le llamamos trabajo.
Esto nos lleva a que en ese resto de horas tengamos que resarcirnos de la penuria que supone trabajar. Lo cual lleva a mucha gente a entrar en una espiral de gasto para justificar su vacío personal que lo rellena con la adquisición de cosas (coches, 3ª vivienda, viajes, ropa …etc). Entramos en un bucle de reforzamiento que no hace más que aumentar la espiral.
Lourdes Jódar Fernández
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