La envidia puede considerarse tanto un sentimiento como una emoción. En el primer caso, sería "permanente" ya que, aunque una persona no está envidiando a otra las 24 horas del día, sí que se ha dado el caso de que existan personas que sean envidiosas por naturaleza.
El objeto de envidia siempre suele ser una persona, debido a que esta posea algo que el envidioso no tiene o posea en menor grado.
En cuanto a la persona envidiosa, no hay un prototipo definido. Cualquier persona puede sentir envidia, en mayor o menor grado. Esto está directamente relacionado con la personalidad de cada uno, lo satisfecho o insatisfecha que considere uno su vida...
La envidia está tachada de ser un mal sentimiento/emoción. En algunos casos se suele decir que la envidia que no siente hacia su amigo es "sana" pero esto es imposible puesto que se siente envidia al fin y al cabo.
GALILEO
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